Para estudiar en una de las mejores universidades del mundo es necesario, antes que nada, desearlo. Eleno Castro, graduado del colegio Don Bosco y licenciado en Economía y Negocios de la ESEN, nos cuenta que él nunca soñó con estudiar en Harvard, no estaba en su horizonte porque aún no había descubierto su pasión profesional. Sin embargo, durante sus años de estudio en la ESEN, descubrió para qué era bueno y cómo podía poner sus conocimientos al servicio de su país.

Castro ingresó a la universidad con la idea de estudiar ingeniería. En el primer año de estudio en la ESEN las clases son las mismas para todas las carreras. “Entre los cursos de primer año hay de derecho, matemáticas, introducción a la economía, liderazgo, entre otros. Recuerdo que el curso de Introducción a la Economía lo impartió la Dra. Carolina Rovira (actual decana de la Licenciatura en Economía y Negocios) y me apasionó; ahí decidí cambiar de carrera y dedicarme de lleno a la economía”, comentó Castro.

En ese momento inició una búsqueda que no sabía adónde le iba a llevar; para entender a qué quería dedicarse tenía muchas preguntas que contestar, como, por ejemplo, ¿por dónde empiezo?, ¿dónde podría trabajar?, ¿cómo será mi día a día?, ¿quién hace este tipo de cosas?, ¿cómo las hace?

El inicio de un sueño jamás soñado

Eleno Castro encontró respuesta a su inquietud profesional con el apoyo de una comunidad académica comprometida con que cada estudiante alcance su mejor versión. “Para soñar en grande es necesario tener confianza en el valor de uno mismo, inspiración y guía por parte de personas que ya recorrieron ese camino. Muchas personas en El Salvador serían capaces de alcanzar metas altísimas en otros contextos. Yo tuve suerte de conocer a personas que creyeron en mí y me apoyaron”.

Castro asegura que el entorno estimulante de la ESEN fue parte esencial para que él apuntara alto. “Conversando con una catedrática en su despacho ella me animó a aplicar a Harvard. Para mí era algo inimaginable, en ese momento me había costado incluso pasar el examen del Toefl (certificación básica del idioma inglés). Pero ella sembró la semilla y me dio el contacto de un exalumno de la ESEN que estudió en Estados Unidos. Le escribí y, sin conocerme, este joven me ayudó en el proceso y hasta el día de hoy somos muy buenos amigos”.

Sólida base académica

Para estudiar con los mejores profesores a nivel mundial es necesario tener una preparación académica sólida. “La educación que recibí fue robusta. Me dieron una idea fuerte del área y cuando llegué a Harvard no empecé de cero. La ESEN es una universidad muy retadora, se nos exige mucho y eso ayuda a forjar un buen ritmo de trabajo; desarrollé el pensamiento crítico que es clave para ofrecer soluciones en las empresas y a nivel país. Es un reto intelectual constante”. Eleno recibió el reconocimiento “Outstanding SYPA Award” por un desempeño altamente distinguido en el análisis de políticas públicas en su tesis de la Maestría en Administración Pública y Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard.

No se cierren las puertas ustedes mismos

Eleno Castro anima a los jóvenes que van a iniciar su carrera universitaria a atreverse y dar el paso para estudiar en una universidad de calidad. “Aún si creen que no tienen los fondos, es clave que se arriesguen a hacer los exámenes, es la forma de saber qué oportunidades pueden tener. Hay que intentarlo, no tenemos que cerrarnos las puertas nosotros mismos, sino probar opciones y luego ver el panorama. ¿Qué universidades me han aceptado?, ¿dónde puedo estudiar lo que me gusta? Es el momento de intentarlo, ya luego viene el momento de ver opciones y decidir”, explica este joven, quien estudió en la ESEN con una beca a la excelencia académica; en la Universidad de Harvard, financiado por la beca del presidente de Harvard; y actualmente estudia becado el Doctorado en Economía en la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore, Maryland.